menu Menú
Un salto para la eternidad
Por Miguel M. Delicado Publicado en Ciencia, Geografía, Tecnologías en 16/10/2012
Ra´s al-Jathi. La cabeza del arrodillado (I) Anterior Odio esta chapuza... Siguiente

Un hombre aventurero, Félix Baumgartner, una ilusión y un negocio.

Quizás crea Vd. que el video se inserta para que sea uno más de los millones de enlaces que habrán por la red de redes y el comentario de tal o cual aprendiz de escribiente (que no de escritor [palabras mayores]). Bueno, pues puede ser así, pero casi me inclino más por apropiarme de una redención ansiolítico-social, que linda con el éxito infructuoso de la misma y el disfrute del individual de un desconocido hasta hace unos pocos días.

Esto recuerda a los casi desconocidos, corrijo; ¡totalmente desconocidos! astronautas que han estado en la Luna y de los que nadie recuerda sus nombres. Sí, sí, ya sé que recuerda Vd. a Armstrong, Collins y Aldrin, pero ¿sabe algo de Conrad, Gordon y Bean? ¿y de Schmitt, Cernan y Evans? Vale, pues también estuvieron allí…

Somos así, queremos destacar en una sociedad que no nos va a recordar ni aunque seamos los únicos entre 12 hombres (como doce apóstoles) en toda la historia de la humanidad, hombres que han conseguido estar en donde nadie antes, ni después (por el momento), ha podido. El proyecto Apolo logró situar a 12 hombres en la Luna de un total de 27 que lograron orbitarla, si no fuiste de los tres primeros, nadie recordará quién eras. Bueno, quizás si te ocurrió algo grave e hicieron una película del desastre… ¡Ah, sí era… Lovell!

Felix Baumgartner

Baumgartner nos da una lección de espíritu, un aliciente de superación y de empatía social. Yo desde aquí le doy mi más sincera enhorabuena porque me encanta el paracaidismo (otro deseo no cumplido) y mi pésame póstumo para dentro de muchísimos años, por el gran olvido humano; el desentendimiento seguro de un logro sin igual por una audacia con pálpito sentimental, de un erizo piloso en el momento en que sus vueltas descontroladas hicieron padecer a un organismo vivo (la sociedad) que muy pronto le olvidará.

El hombre desea triunfar, es imposible que todos lo logren, pero al menos dejemos que Baumgartner disfrute el tiempo que pueda de una hazaña sin parangón, el salto en caída libre más impresionante de la historia.

Una proeza técnica que demuestra que el hombre, cuando está unido y lucha por un fin, consigue sin mucha dificultad lo que con mucho esfuerzo es capaz de destruir en poco tiempo; el éxito.

No hemos sido capaces de recordar doce nombres, intentemos al menos que a nuestros nietos le podamos relatar aquél famoso salto en el que un tal… ¡Uf, no recuerdo bien, creo que era Bumbarner! consiguió ponernos los pelos de punta cuando empezó a girar descontrolado y luego nos dio la alegría de verlo tomar tierra con una suavidad digna de un gran paracaidista.

Salto estratosférico Red Bull Stratos

«Para obtener éxito en el mundo, hay que parecer loco y ser sabio». Montesquieu (1689-1755) Escritor y político francés.

astronautas aventurero estratosfera Félix Baumgartner guinness logro paracaidismo Red Bull Stratos salto caída libre


Anterior Siguiente

Deje un comentario (se revisan antes de publicarlos)

keyboard_arrow_up